Sensibilidad Misionera en Puerto Rico
La sensibilidad misionera en la isla de Puerto Rico es muy fuerte: hablas de misión y la gente se apasiona. Hay muchas razones, aquí compartimos algunas:
A principios del siglo XX, fue un movimiento laico el que mantuvo viva a la Iglesia católica. Tras el paso de la isla a manos de Estados Unidos (como botín de la guerra hispano-estadounidense), había muy pocos sacerdotes españoles y el protestantismo invadió Puerto Rico. En este contexto, algunos laicos iniciaron un movimiento misionero que mantuvo viva la llama de la fe en muchas familias a través de las visitas a domicilio y la predicación.
Los jóvenes se interesan por las experiencias misioneras, especialmente en los países latinoamericanos, y realizan experiencias de varias semanas. El movimiento “Verano Misionero” es un programa de las Obras Misionales Pontificias que preparaba a los participantes para vivir estas experiencias. Varios misioneros puertorriqueños de nuestra Comunidad también han madurado su opción vocacional a partir de la participación en estas actividades. Hoy en día nuestra Comunidad colabora con Verano Misionero en la formación de los que se preparan para vivir estas experiencias.
Nuestra Comunidad trabaja para aumentar esta sensibilidad y ofrece oportunidades para prepararse para las misiones en otros países. También acoge a jóvenes (principalmente de Estados Unidos) que vienen a Puerto Rico para realizar experiencias misioneras en las que participan en diversos servicios:
- Visitas a los enfermos y a las familias pobres;
- Ayudar a las familias necesitadas con la limpieza interior y exterior de la casa;
- Clasificar y ordenar el material que la comunidad recibe para los pobres;
- Colaboración en las actividades sociales de nuestra ONG “Casa sin Fronteras”;
- Participación en algunas actividades pastorales con los misioneros.
Animación misionera
Las experiencias de evangelización con adultos son frecuentes en nuestro contexto parroquial. Las visitas casa por casa han impresionado tanto a los católicos, sorprendidos por esta vitalidad, como a los que acuden a otras iglesias protestantes, que les han felicitado por estas iniciativas.
El impulso misionero va más allá de los límites de la parroquia. Desde nuestra llegada, hemos iniciado actividades de animación misionera en las diferentes diócesis de Puerto Rico hasta algunas parroquias de Florida.
Visitamos parroquias, grupos, colegios de toda la isla y recibimos grupos en nuestro centro, fomentando el alcance misionero ‘ad gentes’. También colaboramos en las actividades de las Obras Misionales Pontificias a nivel diocesano.
Nos implicamos en el acompañamiento de grupos misioneros vinculados a nuestra comunidad (niños, adolescentes, jóvenes, parejas y adultos de GimVi) y organizamos retiros de evangelización (Je-shua, Emaús y Caná) en los que los laicos son los protagonistas.
República Dominicana y Haití
Desde 2018 hemos activado varias iniciativas en países vecinos. Misioneros y laicos realizan misiones para apoyar la labor de las Siervas de María en la República Dominicana y la cuasi-parroquia San José en Haití.
Haití es el país más pobre de todo el continente americano, situación agravada por las catástrofes naturales que devastaron su territorio en 2010 y 2016. La alimentación, el agua potable, la educación, las casas seguras y el trabajo son necesidades básicas de las que carecen miles de personas, por lo que en 2015 nació la iniciativa ‘Haití se llena de Esperanza’.
Al menos una vez al año, un grupo de voluntarios llega a Port Margot para llevar productos de primera necesidad a los habitantes y realizar visitas a las familias y los enfermos. Ayudan en los trabajos de mantenimiento de las estructuras gestionadas por los Siervos de María (casas, centros médicos, escuelas, etc.).
El coordinador del grupo es Iván Ruiz, que describe así la iniciativa: “El grupo está formado por muchas personas que han hecho de la frase “Ama a Dios y al prójimo como a ti mismo” un mandato concreto para sus vidas. Pedimos al Señor que nos siga inspirando para compartir lo que tenemos con los más necesitados”.
